España es el tercer país europeo más preocupado por el calentamiento global, solo por detrás de Italia y Portugal. Y Europa es, de largo, la región más interesada del mundo en frenar el cambio climático. Con esta situación, y ante los exigentes retos que presenta la Agenda 2030 en materia medioambiental, no es de extrañar que se haya disparado la demanda de puestos de trabajo especializados en el cuidado del medio ambiente y la gestión de energías verdes.
El cambio climático es, además, una prioridad entre aquellos que se incorporan por primera vez al mercado laboral. El 41% de los que tienen entre 16 y 25 años lo mencionan como uno de los tres problemas más importantes del país, frente al 30% del conjunto de la población. Además, el 71% de las personas que comprenden ese rango de edad considera que el cambio climático es consecuencia de la actividad humana.
Todas las fuentes apuntan a que, desde autónomos hasta grandes empresas, la cuestión medioambiental ha ganado peso en las agendas y los planes de negocio. Por eso, la presencia de la figura de consultores de sostenibilidad es cada vez más frecuente en las empresas.
Según el estudio ‘Empleos y Sectores Emergentes 2024’, publicado por DigitalES (la patronal del sector de tecnología e innovación), en los últimos cinco años el volumen de ofertas publicadas para consultor de sostenibilidad ha crecido más un 863%. A estas ofertas también hay que sumar las de consultor de cambio climático, que han crecido un 538% en el último lustro.
Con las previsiones actuales, es normal que cada vez más empresas estén enfocando sus recursos en busca de una mayor sostenibilidad medioambiental de sus procesos productivos. Una acción que, en consecuencia, está trayendo consigo nuevos puestos de trabajo enfocados a esta tarea. De hecho, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) estima que, de aquí a 2030, se pueden generar hasta 348.000 empleos al año relacionados con sostenibilidad y transición ecológica.
La mayoría de nuevos empleos, ligados a las energías renovables
Otro de los datos relevantes que se obtienen de este informe es la constatación de que la mayoría de nuevos empleos emergentes van a ser consecuencia de la inversión en energías renovables. En los últimos cinco años, la cantidad de ofertas de trabajo publicadas en portales digitales para instalador fotovoltaico ha aumentado un 770%.
Pero este no es el único puesto que ha experimentado incrementos significativos. También se han multiplicado las ofertas para project manager de instalaciones fotovoltaicas, que en cinco años ha crecido un 330%. Por su parte, las de ingenieros fotovoltaicos han subido un 206%, las de ingenieros de eficiencia energética un 221% y las de técnicos de eficiencia energética un 125%.
Asimismo, el PNIEC también especifica las ramas de actividad en las que el impacto será mayor. En este sentido, destaca la rama de comercio y reparación como aquella que en la que la aparición de estos puestos emergentes va a tener un mayor impacto. Con un crecimiento previsto de 62.300 empleos hasta 2030 es, además, la que lidera el ranking. Y, precisamente, los puestos vinculados a cuestiones comerciales y de asesoría en renovables han crecido un 221% desde 2019.
Las ofertas que han aumentado más en términos relativos son las destinadas a comercial de eficiencia energética, con una subida del 636%, y las de gestor energético (458%). Tras estas se posicionan las de comercial de energías renovables (+ 212%) y las de asesor energético (+149%).
Por último, el modelo de economía circular en el que cada vez más empresas se involucran de forma activa también conlleva un aumento de las ofertas para operario de reciclaje, que se han triplicado en los últimos cinco años.
La transición híbrida
La evolución hacia modelos de negocio más respetuosos con el medioambiente y la aparición de estos puestos emergentes también tiene mucho que ver con la tecnología. Es lo que se ha llamado ‘transición híbrida’, un concepto acuñado para hablar de manera conjunta de la transición digital y la ecológica y, además, ensalzar la necesidad de abordarlas de manera coordinada.
Una transición en la que Castilla y León está llamada a jugar un papel más que relevante. En Europa, solamente Noruega obtiene un porcentaje mayor de producción eléctrica renovable que nuestra región, que puede adoptar un papel de liderazgo en el impulso de estas energías.
En 2023, Castilla y León fue la comunidad con mayor potencia instalada renovable en España, alcanzando un cómputo de 13.046 MW verdes, lo que representa el 95,8% de su parque de generación. Un motivo más para instalarse en una comunidad que exporta a otras regiones un 118% de la energía que consume, y que utiliza ésta para la producción de insumos y equipamiento que se exportan a nivel internacional.
Consultores de sostenibilidad, data engineers o desarrolladores de inteligencia artificial. La transición híbrida demanda nuevos profesionales y nuevos modos de actuación. Y desde Aever queremos apoyar a todos estos constructores del futuro, llamados a liderar el cambio hacia un futuro de tecnología y respeto al medioambiente.
Si tienes un proyecto, o una idea, te estamos esperando. Escríbenos y descubre las ayudas que podemos ofrecerte para impulsar la energía sostenible en Castilla y León.